Al igual que el año pasado, estará entre los asistentes el presidente Javier Milei, acompañado por la mayor parte de su gabinete. Además de homenajear a las víctimas, Milei reafirmará su apoyo al Estado de Israel, que al igual que la Justicia argentina sostiene que Irán estuvo detrás del atentado de julio de 1994, que redujo a escombros el edificio comunitario, causando además cerca de 300 heridos.
En la actualidad siguen sucediendo situaciones en torno al atentado. El Ministerio de la Diáspora israelí publicó un informe que reveló los vínculos operativos de la mezquita At-Tauhid de Buenos Aires con el régimen iraní que financió la voladura de la mutual judía.
El dossier se titula “los tentáculos de Irán en América Latina: incitación al antisemitismo y sabotaje a la estabilidad de la región en Argentina”, tiene 13 fojas y describe las oscuras relaciones entre el imán Karim Paz y el gobierno de los ayatollahs.
La justicia federal argentina probó que Irán estuvo detrás del ataque a la AMIA, que ejecutó el ataque a través de la organización terrorista Hezbollah, y que tiene células dormidas en la Triple Frontera para operar cuando decida el líder religioso Ali Khamenei.
Dolorosamente, la impunidad sigue, el terrorismo también.