Después de los aranceles de 104% que fijó Donald Trump a China, la nación gobernada por Xi Jinping fijó en 84% las tasas para los productos que arriben desde Estados Unidos este miércoles.
De esta manera, el régimen de Beijin tomó una contramedida adicional, tras prometer de nuevo “luchar hasta el final” contra las medidas comerciales del Gobierno de los Estados Unidos, en un extenso comunicado publicado en esta jornada, en la que también entraban en vigor los recargos de Estados Unidos sobre las exportaciones chinas.
Trump justificó la medida como parte de su estrategia de “aranceles recíprocos”, que busca presionar a los socios comerciales con superávits elevados con EEUU, como China, India o Vietnam.
Los gravámenes generaron turbulencias en los mercados asiáticos. En Taiwán, el índice Taiex cayó un 5,8%; en Tokio, el Nikkei perdió un 4,86%, y en Hong Kong, el retroceso fue del 1,6%. El impacto también se sintió en India, donde los aranceles del 26% provocaron caídas en los índices Sensex y Nifty 50.
Pese a los esfuerzos de algunos gobiernos por estabilizar sus mercados, las restricciones elevaron el riesgo de recesión y desorden en el comercio internacional.